El Pueblo Peludo: Tipos de alimentos para los perros

Pienso

Sin duda, la mejor forma de alimentar a nuestros animales es con pienso. En el pienso se encuentran todos los nutrientes necesarios para dar una correcta alimentación desde cachorros hasta adultos. Son fácil de almacenar, higiénicos y seguros. Al tener poca humedad ocupan menos y pesan poco.
El pienso no se deteriora si se deja puesto en el comedero hasta que el perro se lo acabe. Huelen menos que los húmenos, y al ser masticados ayudan a limpiar los dientes y estmular ls encias.

Existen muchísimos formatos especializados según la edad del perro ( cachorro, adulto o senior), según el tamaño ( perro grande, pequeño, mediano o gigante) e incluso especificos para algún tipo de enfermedad ( gastrosensible, hipoalergénicos, para enfermedades urinarias, etc.)

Alimento húmedo

La mejor característica de la comida húmeda es la palatabilidad, a los perros les pirran las latitas de comida húmeda.

Lo malo es que este tipo de comida tiene el peligro de hacer al perro desarrollar una obesidad si no se controlan bien las cantidades o si el perro es naturalmente sedentario. Por lo que lo ideal sería dárselas sólo de vez en cuando y aimentarlo diariamente con pienso.

Otra desventaja es que se estropea con el calor y atrae a las moscas. La calidad de la comida de lata se nota muchísimo más que en el pienso. Una lata muy barata puede tener trozos de huesos, plumas, escamas...que pueden dar problemas gastrointestinales. No es raro que con este tipo de comida le pueda dar diarreas a nuestros peludos.

Al igual que con el pienso, existen latas de comidas clasificadas según la edad, tamaño y posibles enfermedades de perros.

Comida semihúmeda

Normalmente se encuentra como salchichas, carne picada o trozos de carne. Tienen una humedad intermedia entre el pienso y la comida de lata, sobre el 15%-30%. Es muy atractiva para el perro, pero es menos energética que el pienso, y suele llevar muchas grasas y azúcares poco deseados, podrían hacer desarrollar obesidad al perro. Siempre hay que tener cuidado con el tiempo que el alimento semihúmedo o húmedo está expuesto a temperatura ambiente, ya que el proceso de putrefacción es rápido.

Snacks y golosinas

De esto exclusivamente no se puede alimentar un perro, son útiles sobre todo para premiar o educar, a igual que para fortalecer el vínculo existente entre el propietario y el animal. Lo mejor es no darlas en exceso para evitar el sobrepeso y asegurar que come bien con sus comidas diarias. Tienen un alto contenido calórico. Incluso podría ser conveniente reducir la ingesta de la comida diaria si se dan chuches. Hay infinidad de golosinas, desde galletas para perro, pasando por snacks para el cuidado dental e incluso orejas de vacuno secas.

Huesos

Aunque tradicionalmente siempre se le han dado huesos a los perros, es una equivocación. Después vienen las sorpresas.... Son peligrosos especialmente los huesos de pavo y pollo. Se astillan con facilidad y pueden dañar o perforar el esófago, estómago e intestinos del perro y así necesitar atención veterinaria. Nadie quiere que su perro sufra, ¿no? Pues cuidado a la hora de darles huesos.
De hecho se venden unos huesos hechos de vacuno prensado que duran bastante y tienen a los perros entretenidos durante un buen rato ( como un chupete para un niño, diría yo). Y con distintos tamaños, según el tamaño de la mandibula del perro. Se venden hasta pieles con forma de zapato.